Morales anuncia el estreno en abril de su nuevo palacio en el centro paceño
La Paz- El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció ayer que
estrenará en abril próximo el nuevo Palacio de Gobierno o Casa Grande del
Pueblo, un gran edificio de 28 niveles que se construye detrás de la actual
sede de Gobierno en pleno centro histórico de La Paz, cuestionado
urbanísticamente.
El gobernante hizo el anuncio en un
festejo en el Palacio de Gobierno con indígenas de su pueblo natal, Orinoca
(Oruro, oeste), con motivo del duodécimo aniversario de su llegada al poder.
"Tal vez sea la última visita
de ustedes a este palacio viejo, la próxima nos van a visitar en la nueva Casa
del Pueblo", sostuvo.
Justificó que el antiguo Palacio
Quemado, actual sede del Ejecutivo, está lleno de "símbolos del Estado
colonial" y afirmó que "esto se quedará para museo".
"Y la próxima, el próximo año
con seguridad nos van a visitar en la Casa Grande del Pueblo. Está previsto que
el 1 de abril vamos a trasladarnos y desde allá gobernar", agregó Morales.
El nuevo Palacio de Gobierno o Casa
Grande del Pueblo se construye desde 2014 con una inversión de 34,6 millones de
dólares, detrás del actual Palacio Quemado.
El edificio, que tendrá 28 pisos
más un helipuerto, gimnasio y sauna, entre otros servicios, se levanta con una
superficie construida de casi 31.800 metros cuadrados donde antes estuvo una
casa patrimonial y tendrá motivos andinos tiahuanacotas, una cultura
prehispánica.
La construcción fue avalada por una
ley promulgada en 2012 que declaró la obra una "prioridad nacional" y
se saltó la competencia de la Alcaldía de La Paz para coordinar y aprobar el
proyecto.
También está en construcción una
nueva sede del Parlamento, emplazada detrás del actual Palacio Legislativo con
una superficie construida de 40.000 metros cuadrados, que contará con 20
niveles y cinco pisos de sótano que serán aparcamientos.
La oposición y expertos en
urbanismo han cuestionado que ambas construcciones irrumpan en el centro
histórico paceño, donde hasta el momento la única construcción elevada, que
también fue criticada en su momento, era el Banco Central, construido en 1980
con 28 niveles.
El pasado mes de julio hubo una
polémica porque el expresidente Carlos Mesa (2003-2005) calificó ambos
edificios como "verdaderos engendros" por su "desmesurado
tamaño" y consideró que su construcción no es una respuesta a necesidades
funcionales.
Mesa, que también es historiador y
periodista, cuestionó entonces que el diseño de los nuevos edificios no haya
considerado su adecuación a "la armonía arquitectónica con el entorno y el
respeto a la proporción de las edificaciones existentes en su contexto
urbanístico".
El vicepresidente de Bolivia, Álvaro
García Linera, acusó entonces a Mesa de aferrarse a la "estética
republicana, racista, clasista y excluyente", que "está siendo
sustituida por un nuevo espacio público y una estética plurinacional más
participativa". EFE
Comentarios
Publicar un comentario