Hay pruebas sobre ejecución extrajudicial del policía venezolano Óscar Pérez, según Human Rights Watch
Madrid.– La organización Human Rights Watch (HRW) afirma que “hay
pruebas” que sugieren que el policía venezolano Óscar Pérez, quien se rebeló
contra el Gobierno de Nicolás Maduro, “habría sido víctima de una ejecución
extrajudicial”.
En un artículo publicado hoy en
Firmas de EFE (www.efedocanalisis.com/category/firmas/), la investigadora de
HRW Tamara Taraciuk Broner advierte de que la muerte violenta de Pérez “augura
un pésimo 2018 para los derechos humanos en Venezuela”.
Pérez murió, junto a otras seis
personas, el pasado 15 de enero cerca de Caracas después de que “agentes de
fuerzas de seguridad, junto con miembros de un grupo armado partidario del
gobierno, que en Venezuela se conocen como “colectivos”, rodearan la vivienda
donde se escondían”, afirma Taraciuk Broner.
Según la investigadora, las
autoridades venezolanas calificaron a las víctimas de “terroristas” y afirmaron
que fallecieron tras un “enfrentamiento”; pero esta organización afirma que
“hay pruebas” de que pudo tratarse de ejecuciones extrajudiciales.
Antes de su muerte, indica Taraciuk
Broner, “Pérez publicó en las redes sociales varios vídeos afirmando que él y
sus colegas estaban siendo atacados, y que habían iniciado negociaciones con
las autoridades para entregarse”.
En una copia de su certificado de
defunción se indica que la causa de su muerte fue un único disparo en la
cabeza, pero -tras ver el cuerpo- “la hermana de una de las víctimas manifestó
que tenía la cabeza destruida y que advirtió orificios de ingreso y salida de
bala en la cabeza”, agregó.
La investigadora considera además
que “las acciones del gobierno desde que ocurrieron los hechos sugieren que
intentó encubrir lo que realmente ocurrió”, pues las fuerzas de seguridad
destruyeron el edificio donde Pérez y los otros estaban ocultos.
Ni la Guardia Nacional Bolivariana ni el Gobierno de Maduro han permitido a los familiares tener acceso a los
cuerpos, denuncia HRW, al indicar que también “ignoran la voluntad de los
familiares, que querían decidir cuándo, dónde y cómo enterrar a sus seres queridos”.
“El cuerpo de Pérez, el último en
ser enterrado, fue llevado sorpresivamente a un cementerio de Caracas en la
madrugada del 21 de enero. Solo dos familiares pudieron estar presentes durante
el entierro”, recuerda Taraciuk.
“Las autoridades venezolanas
comenzaron el año 2018 actuando como si les estuviera permitido encubrir
posibles ejecuciones extrajudiciales”, denuncia HRW, al hacer un llamamiento a
la comunidad internacional para que exija un esclarecimiento de los hechos. EFE
Comentarios
Publicar un comentario