Firma Óscar de la Renta hace su primer desfile sin fundador
La viuda de
De la Renta, Annette, así como muchos de sus clientes y seguidores -incluyendo
a la cantante Taylor Swift y la supermodelo Karlie Kloss- llenaron la sala para
ver la colección de debut de Copping al frente de la firma. Aplaudieron con
calidez al final, aunque estaba claro que todos extrañaban ver a De la Renta
saliendo de entre bambalinas, del brazo de una modelo y con una gran sonrisa en
su rostro.
El diseñador
dominicano murió de cáncer a los 82 años, poniendo fin a una carrera en la que
vistió a primeras damas, señoras de la alta sociedad y estrellas de Hollywood
durante más de cuatro décadas. Apenas unos días antes había contratado a
Copping como director artístico, y una semana antes de eso, la primera dama, Michelle
Obama, había llevado uno de sus vestidos por primera vez.
"Obviamente
fue una situación dura", dijo Copping a la prensa entre bambalinas tras
ofrecer una tímida reverencia al público. "Pero Óscar es un diseñador que
respetaba de verdad, y compartimos mucho en términos estéticos". El
director creativo añadió que el hecho de que el fundador lo hubiera elegido
personalmente "me dio una cierta confianza". En concreto, Copping
dijo compartir la sensibilidad romántica de su predecesor.
En una nota
distribuida con el programa, Copping, de origen británico, dijo sentirse
"inmensamente orgulloso" de su nueva posición. "Por desgracia,
las cosas no salieron según nuestros planes", señaló, "y nunca tuve
la oportunidad de trabajar con Óscar, algo que lamento profundamente". El
diseñador habló del comienzo de "un nuevo capítulo para la casa",
aunque honrando el legado del fundador.
De la Renta
era conocido sobre todo por sus glamourosos vestidos de fiesta, con intrincados
bordados y los materiales más exclusivos. Copping, que antes fuera director
artístico de la casa Nina Ricci, trabajó con algunos de estos elementos, pero
también mostró una afinidad por faldas más cortas y diseños de día. El último
diseño en recorrer la pasarela en Nueva York no fue un traje de noche, sino un
vestido de cóctel corto, en negro y verde peridotita, complementado con guantes
de piel lila hasta el codo.
Para el día,
Copping se inclinó por trajes de tweed combinando patrones, una idea que dijo
haber tenido mirando por la ventana de su oficina. Tanto las prendas de día
como las de noche mostraban colores vívidos como violeta, magenta y burdeos,
aunque también había mucho negro y azul marino. Las joyas incluían coloridos
collares voluminosos. Un llamativo vestido de cóctel de color azul marino
estaba hecho con lazos de organza, para obtener un efecto como de cuentas.
Comentarios
Publicar un comentario