Benedicto XVI se despide
Duplicidad. En lo adelante el Vaticano tendrá dos papas, uno emérito, renunciante, y el que se elija, que será el oficial
Benedicto XVI se despide
En el exterior en la residencia veraniega de Castel Gandolfo los cientos de feligreses concentrados gritaban “¡Viva el Papa! ¡Larga vida al Papa!”. Alli vivirá como un simple peregrino.
Roma.-Benedicto XVI, el primer Papa que renuncia a su cargo en 600 años, concluyó ayer formalmente un pontificado de ocho años, marcado por los esfuerzos de la Iglesia para dejar atrás los escándalos por abusos sexuales imputados a varios clérigos y para revivir el catolicismo en un mundo que parece cada vez más indiferente a la religión.
En cuanto comenzaron a sonar las campanas, los integrantes de la Guardia Suiza que permanecían vigilantes en la residencia veraniega de Castel Gandolfo cerraron las puertas del palazzo poco después de las 8:00 de la noche.
Los miembros de la Guardia Suiza, con sus característicos uniformes a rayas amarillas y azules, cedieron a la policía vaticana la responsabilidad de proteger a Benedicto, mientras algunos fieles en el exterior comenzaban a gritar “¡Viva el Papa! ¡Larga vida al Papa!” Más temprano, el Papa saludó a los fieles por última vez como pontífice, al decir a la multitud congregada frente a la residencia veraniega que iniciaba la última etapa de su vida como un “simple peregrino”.
Benedicto arribó a Castel Gandolfo tras una emotiva despedida del Vaticano, donde se despidió de la curia vaticana en el patio del Palacio Apostólico. Su colaborador más estrecho lloraba, y la Guardia Suiza lo acompañó en posición de firmes.
Sonaron las campanas cuando el helicóptero con Benedicto a bordo sobrevoló la Plaza de San Pedro.
Tañeron nuevamente cuando arribó a la población de las afueras, donde la Piazza central estaba atestada de gente ávida por tomar fotos del momento histórico.
Horas antes, Benedicto prometió su “reverencia y obediencia incondicionales” a su sucesor en sus palabras finales a los cardenales ayer, una despedida conmovedora y poderosa horas antes de que dejara el cargo.
En una alocución imprevista en la Sala Clementina del Vaticano, adornada con frescos, el pontífice renunciante pareció tratar de restar importancia a preocupaciones sobre posibles conflictos a consecuencia de la peculiar situación que tendrá la Iglesia porque existan a la vez un papa en funciones, cuando asuma, y otro retirado.
Segundo extranjero que dirige la iglesia
Benedicto XVI fue el segundo extranjero en más de cuatro siglos, elegido pontífice.
Ese hecho ocurrió el 19 de abril de 2005 tras un cónclave que duró menos de 24 horas.
En la iglesia, autorizó la misa en latín (en septiembre de 2007) y levantó en 2009 la excomunión a cuatro obispos integristas del movimiento ultraconservador de Marcel Lefebvre, entre ellos el británico Richard Williamson, quien negaba la existencia del Holocausto nazi, lo que desató la ira de la comunidad judía.
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